23 septiembre.

Y ya no queda más que hacer. Y ya no hay más que decir. Y se acabaron las caricias. Y se agotaron las miradas, pues el viento se las llevó. Se las llevó y a ti también. Ahora no se donde buscarte, y ya no se donde apareciste. Apareciste? no lo sé. Tal vez el viento quiere hacerte invisible. Invisible, para sentir; invisible, para cambiar; invisible.. para volver a soñar. Pero soñar para que? si todo ya lo has experimentado? Además ya no duermes para solo vivir las cosas y no soñarlas. Tal vez para que se cumplan los anhelos y los sueños. No hay que dormir, no hay que soñar y solo vivir. Aunque si no soñáramos y no durmiéramos, no existirían los sueños. Los sueños dejarían de ser sueños y anhelos.. Entonces, que hacemos?